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miércoles, 22 de septiembre de 2010

Despedida de soltero

Me estoy saltando lo temporalidad, porque no me da....

Hace dos fines de semana volvimos a vernos los amigos de la Xuntanza, esta vez no era sólo para celebrar la vida y la amistad, teníamos algo concreto, la despedida de Luis, no es que fuera a emigrar, sino que era su despedida de la soltería.

Cuando llegué a casa de Manolo y nos vimos todos, bueno faltaba Paz, el Canarión, cuando nos juntamos el resto ya se respiraba ese ambientillo de celebración, me sentí nervioso y emocionado como un niño pequeño, presentía que nos lo ibamos a pasar genial. El Manolo, que ejercía a la perfección de padrino, nos lanzó unas camisetas y unos pantalones de deportes.

-Home equipado, vamos que no llegamos.

Tarde del Sábado: Descenso en aguas bravas por el Miño con Arrepións, saliendo de As Neves y descendiendo unos 5 o 6 kilómetros por el río que separa Pontevedra y Portugal.

Una vez metidos en el agua todo fue fluyendo:

nos enseñaron a entrar en el río, paramos en remansos, algunos con bellas rocas, a remar en los rápidos, a cruzar la corriente. en un cursillo intensivo sin calentamiento ni posibilidad de avandono.




Tras la adrenalina de los rápidos, las olas, y una vez TODOS mojados con revuelcos y atrapadas nos dijeron si nos queriamos tirar desde una pared, nos subimos pero la gente no las tenía todas, asi que quien pensais que se tiró de prime....


Luego continuamos remando en un paraje increible.



En la zona más tranquila salío el niño malo que llevo dentro, ese cabroncete que no puede parar de reir viendo que la va a montar. Pasó Lorenzo por alado y con un leve empujón de remo, chof, al agua. La misma suerte corrió Manolo 100 metros río abajo, mientras yo hacía sonar mi risa en las gargantas del río.


Luís "el novio" estaba advertido y me costó un poco más, tuve que soltar el remo, agarrar su cayak y girarlo hasta que besó el agua.

Entonces comenzaron a remar a la par, todos juntos tras el "cabrón" que los había tirado, riendo, divirtiéndose con la posibilidad de volcarme. Escapé riendo compulsivamente, a palada viva, hasta que mis brazos y unos pinchazos en el michelín de tanto reir me hicieron parar, entonces me veían vencido, si si, yo vendo cara mi piel!!, a uno le lanzaba agua a los ojos con la pala, a otro lo empujaba, a otro le apartaba el cayak...tiré a Luis y se agarró a mi cayak:

-Tú vas al agua- Me dijo riendo.
-Que araña, mira como se agarra!!- Gritaba Manolo sin parar de menear mi cayak de forma poco eficiente.
Finalmente caí y me sentí realmente contento, de estar allí, de ser así y de disfrutar de gente tan especial.

 

Un día muy especial que disfrutamos juntos.

3 comentarios:

  1. Uff. Si que fue una depedida de soltero muy aventurera ehh.. Me da gusto que aun exista esa sana diversión.

    Lo dijo poque conozco unas despedidas de soltero que hasta dan miedo.

    Un saludines desde México

    **Alma**

    pd. andare por este camino :D

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  2. Cuando la energía fluye entre un grupo de AMIGOS, que se tratan desde los 5 ó 6 años, que han crecido en el mismo colegio, que se han acompañado por los caminos de la vida, a veces cerquita otras veces lejos, sólo fisicamente claro...pues sólo puede salir bien.

    Lo más grande es que nos permitimos ser quienes seamos, sin reproches, ni juicios,ni valoraciones de nuestras diferencias simplemente nos disfrutamos unos de otros.
    Pero nadie ha dicho que el fin de semana acabara aquí, sólo que no entraban más fotos,je,je,je.
    El punto de Mexico en mi mundo va creciendo y creciendo.
    Gracias por las visitas y los comentarios, me da mucha energia ++.

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  3. Hala que bien te lo pasas! y lo mejor la compañía y esa amistad que perdura.

    No me extraña que tengas ganas de reír. Se te ve feliz.

    No sé remar, no coordino mi parte derecha con la izquierda.

    Una vez lo intenté. Alquilé una barca en un lago, remé hacia adelante y allí me quedé, en a lo lejos sin saber cómo volver, dando vueltas muerta de risa hasta que vino el monitor muy cabreado por mi impericia a rescatarme.

    Como fluye tu vida, Suso, disfruta mientras puedas.

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